Consejos para un blog rentable

Un blog es algo relativamente fácil de crear. Sin embargo, lo más difícil de lograr es que ese espacio sea rentable y cuente con un trafico asegurado. Pero nada es imposible en Internet, así que a continuación descubrirás lo que tienes que tener en cuenta para alcanzar el éxito con tu blog.

1.- El nombre o marca apropiada: Encontrar un dominio original pero coherente y distintivo del sector al cual te dedicas no es fácil. Sin embargo, existen ciertas herramientas que te pueden ayudar, como Google keyword Tool, con las cuales podrás colocar cierta descripción de tu producto y te mostrará los resultados correspondientes a tu nicho. Hay que cruzar los dedos y rogar que el nombre que has elegido ya no se encuentre ocupado en otro dominio.

2.- Una plataforma amigable: Insertarse en el mundo del blogging no requiere contratar el servicio de un programador y diseñador de páginas web. De hecho, las plataformas para blogs son en general similares entre sí. La más utilizada es WordPress ya que contiene diferentes temas y diseños que puedes ir probando a medida que vas conociendo la escena del blog. Algunos son pagos y otros no, sin embargo vale la pena intentar con el pack SEO all in one para obtener un mejor posicionamiento de tu blog. Recuerda que es importante ubicarse en las primeras páginas de los resultados de búsqueda. Otra plataforma muy sencilla que no requiere de mayores esfuerzos es Blogger.

3.- La buena elección del tema. Hay que tener en cuenta que un blog puede tratar de temas varios en general o hacer foco en una especialidad. Si existen muchos posts de diferentes materias, el blog podría convertirse menos rentable, tal cual como dice la frase “El que mucho abarca, poco aprieta”. Sin embargo, puedes analizar que temas son los que interesan más a la gente teniendo en cuenta las estadísticas de visitas al sitio pero también la cantidad de comentarios.

4.- Ser parte de AdSense. Este sistema de campañas publicitarias en sitios provisto por Google permite ganar dinero desde el contenido online de tu blog. Es decir, tu sitio debe contar con anuncios publicitarios que en general se encuentran relacionados con el tema en cuestión de tus posts.

En Internet, hay espacio para todos, para aquellos que solo quieren contar sus pensamientos y anécdotas y los que tienen una empresa y la quieren dar a conocer. ¿Acaso hay algo mejor que hacer lo que a uno le gusta y de paso ganar dinero?

Business to Nobody

No es cierto que las tecnologías, en si, hayan cambiado nuestras vidas. Lo que hemos vivido en los últimos años, es más bien un cambio en el papel que le damos a las tecnología (su presencia en nuestro quehacer cotidiano).

Las redes sociales existen desde el principio de los tiempos, el consejo de sabios, el ágora griega, el foro romano, los caballeros de la tabla redonda, la charla en el bar,... No hemos inventado nada, sólo le hemos añadido tecnología.

Internet (lo online) sólo pasa a ser rentable cuando se deja de concebir una red de ordenadores y/o dispositivos electrónicos, y se empieza a ver como una red de personas.

Por muy innovador y beneficioso que sea tu servicio, idea o modelo de negocio, de nada servirán tus esfuerzos, si los potenciales usuarios no lo perciben como tal. Tampoco sirve gastarse grandes cantidades en campañas de comunicación para atraer visitantes a tu espacio online, si una vez allí, no encuentran algo que les ayude a satisfacer sus necesidades, a sentirse participes y a poder interactuar y dar su opinión (y que esta sea escuchada).

Los tecnólogos tienen a veces la tentación de pensar que el mundo lo cambia la aparición de una nueva tecnología, cuando la verdad, es que son las personas las que marcan el rumbo cuando deciden validar y adoptar una determinada innovación.

El marketing debe dejar de bombardear y disparar de manera indiscriminada para comenzar a atraer y seducir. Es un proceso más complejo y largo, pero mucho más eficiente.

Crear, comunicar y compartir contenidos que enganchen y que el público nos perciba como una marca y unos valores a seguir.

Y tú, ¿piensas seguir dirigiendo tu negocio a ninguna parte?